“Tiza”, inefable protagonista de todos los tumultos habidos y por haber en aquellas clases de nuestro cuarto curso en el colegio, generaba, por ello mismo, cierta inquina en algunos profesores. Uno de ellos, el Padre Morra, nos enseñaba Latín y Literatura… El “Pelado”, como irrespetuosamente llamábamos al calvo sacerdote que, por encima, era tío directo de uno de nosotros, nuestro bien amado y ya fallecido Ricardo “Otacyr” Lima Morra, tenía en especial marcación al protagonista de nuestra historia, Monti como Estrella26, y, para mayor proximidad, su hermano…
Lo cierto es que, luego de un examen parcial, el cura de marras dio las calificaciones que habíamos obtenido, y al llegar a Monti dijo: “7”. Las notas eran del 1 al 10 y hasta 3 se consideraba “Aplazado”. Aquel 7 sonó como música celestial a los oídos del estudiante quien saludó con gestos de victoria, y recibió de nosotros, siempre dispuestos a crear disturbios por las razones más pueriles, una ovación prodigada por un coro de desaforados compañeros que vivaban su nombre: “Tiza, Tiza…” Cuando más o menos se restableció la calma, el cura continuó diciendo: “Obtuvo un 7 pero tiene un punto menos por la conducta en clase” y ya sumaba 6; ante el estupor general, prosiguió y dijo: “Tiene un punto menos por la conducta en las otras clases…”, con lo cual ya iba a 5. En este momento, “Tiza” se tiró aparatosamente al piso cuan largo y flaco era, simulando un desmayo; lo rodeamos y comenzamos a corear vociferantemente “In jus ti cia, in jus ti cia…”, mientras “Tarzán”, siempre presto a ahondar los desastres en clase, apantallaba ampulosamente al (comillas) “desmayado”. Pero la cosa no terminó allí. El cura continuó con la implacable resta de puntos… “Un punto menos por la conducta y la disciplina en el patio”, y el 7 ya era un 4. Y no encontrando razones para llegar a su objetivo, que era el aplazo, dijo, rotundo: “Y otro punto más…”
Aquel 3 fue quizá el más injusto de cuantos hayamos recibido en largos años de Colegio, pero resulta hermoso poder recordarlo entre carcajadas…
26 Ella es mi mujer, la compañera de mi vida…